domingo, 25 de septiembre de 2016

Habia una vez

Seré heraldo de buenas noticias, sólo si te quedás un rato más.. Los espíritus soplan si quieren y vos que recién te enteras tarde otra vez, mi amor...
Sigo siendo el mismo de siempre y te aburre mi voz, llega el adiós.
Vengo cínico, fóbico, crudo, hervido y asado por vos. Va a despejar, mi amor.
Hay tantas partes tan lindas sin tu traicióny el mundo sigue girando aún sin tu amor. Voy enfrentando tu sinceridad.. Vuelvo a sentirme extraño si me consolas...
Borraremos los rastros, las noches con más penas de bar, sin recordar que hubo un tiempo en que toda impaciencia era gracia para poder reír y festejar de amor.
Con el rostro gustoso sin máscara que tape el mohín de tu desdén..
Con los puños en alto, deseando al final hacer la revolución, con una canción de amor! 
Es solo una demostración de confianza. Te amo y quiero estar con vos y nadie mas. Me encantaria ser solo tuya y vos solo mio. No se que sentiras vos, otro dia lo hablamos. Por un lado pienso que algo te pasa porque accedes a vernos de nuevo. Pero con vos nunca se sabe... Pero bueno, quiero que sepas que me encanta verte ayer la pase re lindo y quiero muchos dias asi, quiero que hagamos todo lo que no hicimos. Me encantaria. Armar una escapada a la playa el feriado de octubre. Que te parece? Te amo tanto lindo.

sábado, 24 de septiembre de 2016

Y algo estallaba en el medio si estabas vos, sobraban detalles... Y ahora además de excusarte pedís perdón, y solo dormís.
Y sé, no te gusta.. y perdiste, ay! perdiste esa risa, la escondiste o murió..?
Hoy hablas de que todo está muerto y el que murió sos vos y no te enteraste! Decís que hace tiempo las cosas eran mejor y hoy nada esta bien...
Puedes tu morir desde antes, o dudar a que llegaste.
Puedes llenar la pared de recuerdos, o empezar a brotar aunque sea en invierno...
Puedes volverte un bello recuerdo o gritar de una vez: Cuando sufro un dolor es cuando mas aprendo!!!

¿Que estabas esperando? Siempre estando de paso... Solo hablando de quejas, mientras todo se aleja..-

lunes, 19 de septiembre de 2016

Hay días que te entiendo tanto. Y no puedo parar de agradecer lo mal que me hiciste, por que ahora entiendo. Entiendo muchas cosas. Cuando me siento fría te entiendo, y esa comprensión de aquello me hace valorar mis ratos cálidos. Recuerdo cuando hablábamos de nosotros en una de esas, que me dijiste algo así como: que situaciones asi te hacían sentir mas vivo. Te referías al sentir. Eso que pasaba poco en vos. Y pasa. Y ahora lo entiendo. Y tenías razón. Si bien soy cursi no puedo serlo todo él tiempo. Ya no. Algo cambio en mi, quizas para siempre. Y esta bien. Te lo agradezco. Me enseñaste mucho y gracias a eso valoro mas ciertas cosas. Por otro lado, hay cosas que todavía no entiendo de vos. Quizás por eso me gustas tanto. Pero me gustaría saber mas de vos, que piensa que siente tu ser. Tus miedos y tus pasiones. Es raro todo, pero acá estamos. Siento que falta mucho mas todavia. Mientras sea sano, voy con vos. Eso siento ahora. Te quiero

domingo, 18 de septiembre de 2016

Ahi vamos de nuevo.. De nuevo...

Nos hemos quedado mirándonos, un poco incómodos, sin saber qué decir. Yo tengo tantas preguntas que quiero hacerte y no me atrevo. Vos tenes tanto miedo de que te las haga... Me calla el miedo de perderte.
Para ganar tiempo enciendo un cigarrillo, sonrío tontamente, hago un comentario estúpido. Por debajo de nuestras voces, inaudible, hay un diálogo que no tiene nada que ver con lo que nos estamos diciendo.
¿Qué pasó en realidad? ¿Por qué nos hemos convertido de pronto en estos dos extraños acartonados con ganas de ponerse a llorar? Porque yo tengo ganas de llorar... y vos te­nés los ojos vidriosos.
Nos incomoda la ropa, la hora, el lugar, nuestras propias historias divergentes, el encuentro a destiempo... o por lo menos en un tiempo que todavía no se ha cumplido para que podamos estar juntos siempre.
ESPERA.
Qué palabra horrible.
Que sinónimo horrible de agonía.
Repentinamente recuerdo todos los consejos que me han dado con buena voluntad algunos amigos.
"No lo presiones."
"Dejá que sea él el que decida."
"Dale tiempo."
"No le hables de..."
"No le digas que..."
"Que él encuentre en vos tranquilidad y un poco de alegría."
Conviene. No conviene.
¿Por qué tengo que hacer las cosas que convienen si no son las cosas que quiero hacer? ¿Por qué no puedo decirte lo que necesito decirte?
-Casi me jugué por vos... -murmurás.
Casi.
Ya sé, es la enfermedad llamada costumbre.
Casi.
Casi te jugaste por mí.
Mirás la hora en tu reloj, disimuladamente, haciéndote el que se acomoda el puño de la camisa.
Todavía no te atreves a decírmelo, pero yo entiendo.
¿Por qué entiendo?
¿Por qué siempre tengo que entenderlo todo? Nos ponemos de pie.
Me llevas a mi casa en tu auto.
Y me asombra no ponerme a gritar, a golpearte con bronca.
Me asombra mi silencio resignado.
No sé cómo empezar, cómo decirte que lo estuve pensando, que hace ya muchas noches que no puedo dormir y cuando el sueño por fin me vence, el sobresalto me despierta.
Miro tu pelo. Nadie va a acariciarlo.
Miro tus manos huérfanas.
Todo lo que crecía, lo que remontaba vuelo, volverá a tu contorno.
Serás un cuerpo bello debajo de la camisa, un cuello envuelto por la corbata, una firma al pie de las planillas, una conversación con los amigos después del club el viernes a la noche.
Serás un hombre como tantos hombres acelerando el auto para no llegar tarde a la oficina, tomando la pastilla antes de las comidas, organizando cuidadosamente su rutina.
Ya basta de cartas de amor escondidas en tu escritorio. Ya basta de bajar la ventanilla del coche, al despedirnos, para que yo te pregunte: "¿Me querés?" y vos me digas: "Siempre preguntando lo mismo." Y te sonrías: "Sí que te quiero, tonta."
No sé cómo empezar, cómo decirte que es más fuerte el dolor de compartirte que la alegría de tenerte.
Me ayudaste, te ayudé: nos usamos en el mejor sentido de la palabra.
-Estás furiosa.
-No, estoy asustada.
-Mejor seguimos hablando mañana...
-Mañana no. Digamos todo ahora.
-Estoy cansado. Estás cansada. Nos vamos a herir. No quiero seguir hablando ahora.
Chispas tus ojos. Y el brillo de una lágrima que no querés soltar, pero que está, que cae y llega hasta la comisura de tu boca.
Mientras vas caminando hacia la puerta siento que me vacío.
Todavía es invierno mientras vas caminando hacia la puerta.
¿Te olvidarás de mí? ¿Arreglarás las cosas? ¿Soportaré la soledad, mi mano que quiere
discar tu número y aprieta el puño y no?

¿Hice bien? ¿Debí darte un poco más de tiempo?
Me da rabia la salida fácil, la escapatoria.
Porque después de todo es una salida fácil esgrimir una predicción en vez de dar una respuesta valiente.
¿Y quién me dijo que los hombres son valientes?
Es invierno y han podado los árboles de la calle.
¿Llegará la primavera, echarán hojitas nue­vas, echaré yo hojitas nuevas alguna vez?...

sábado, 17 de septiembre de 2016

Es infinito. Lo que siento por vos es infinito. Jamas me paso una cosa así. Con esta intensidad. Es un amor autentico. Es diferente. Hay tanto para hacer, podemos ser tan plenos...

Tengo miedo.